En 1995, Urgyen Sangharakshita, fundador y primer líder de la Orden Budista Triratna, cedió la responsabilidad de realizar ordenaciones públicas a un grupo de cinco miembros de la Orden —Sanghadevi, Sona, Srimala, Subhuti y Suvajra— con quienes había colaborado estrechamente durante muchos años y quienes compartían profundamente su comprensión de Ir al Refugio, el acto budista esencial. Con esta cesión, se estableció el Colegio de Preceptores Públicos. Desde entonces, el Colegio ha crecido y se ha desarrollado considerablemente; puede conocer a sus miembros aquí.
La función principal del Colegio de Preceptores Públicos es la ordenación de hombres y mujeres dentro de la Orden Budista Triratna.
CENTRALIDAD DE LA ORDENACIÓN
La principal responsabilidad del Colegio de Preceptores Públicos es supervisar la ordenación de nuevos miembros y darles la bienvenida a la Orden Budista Triratna.
Cuando Urgyen Sangharakshita fundó la Orden Budista Occidental en 1968, tenía muy claro que estaba estableciendo una comunidad de hombres y mujeres comprometidos incondicionalmente con una vida en el Dharma, empleando las enseñanzas y prácticas provenientes del Buda.
La ceremonia de ordenación es nuestro ritual central. Sigue un patrón tradicional y es sencilla y profunda. En su núcleo se encuentra el acto de Ir al Refugio, la recitación formal de los Tres Refugios, el compromiso con el Buda, el ideal de la iluminación humana, con el Dharma, el camino y la enseñanza, y con la Sangha, la comunidad de personas iluminadas que han recorrido el camino. La recitación de los Diez Preceptos que sigue refleja la aspiración de expresar Ir al Refugio de una manera inmediata y práctica.
La ceremonia consta de dos partes: una ordenación privada, presenciada únicamente por un Preceptor Privado, que indica el compromiso personal de vivir la propia Ida al Refugio a las Tres Joyas, incluso si se realiza en completa soledad; y una ordenación pública, dirigida por un Preceptor Público y presenciada por otros miembros de la comunidad, familiares y amigos. Culmina con la imposición de un kesa ceremonial y el anuncio de un nuevo nombre budista. No se está solo, sino que se participa en la vida de Dharma en el contexto integral de una sangha o comunidad espiritual.
El significado y el espíritu del ritual se resumen en los versos de aceptación, recitados como parte de la ceremonia pública.
- Con lealtad a mis maestros, acepto esta ordenación.
- En armonía con mis amigos y compañeros, acepto esta ordenación.
- Para alcanzar la Iluminación, acepto esta ordenación.
- Para el beneficio de todos los seres, acepto esta ordenación.
RESPONSABILIDAD DEL COLEGIO
La responsabilidad principal de un Preceptor Público es presenciar la efectiva toma de refugio de un Mitra ante las Tres Joyas en la ceremonia de Ordenación Pública, mediante la cual ingresa a la Orden. Este testimonio es personal y depende de que el Preceptor reconozca en quien ordena el mismo compromiso espiritual que él mismo encuentra en sí mismo. El carácter personal de esta relación entre el Preceptor y quien ordena es la base de la Orden. Todas las responsabilidades de un Preceptor Público se derivan de esto. Además de realizar ordenaciones, otras responsabilidades del Colegio incluyen:
- Nombrar y Capacitar a los Preceptores Públicos
- Supervisar la capacitación para la Ordenación
- Nombrar y Capacitar a los Preceptores Privados
- Revisar a los Preceptores Públicos y Privados
- Decidir sobre suspensiones y expulsiones de la Orden